El azúcar en los niños
Desde que me convertí en madre, empecé a reflexionar sobre el consumo de azúcar por parte de los más pequeños, y de la importancia de comer siendo plenamente conscientes.
El exceso de azúcar en la dietaes una cuestión asociada a un gran número de problemas de salud y aunque es cierto que se habla mucho de la problemática del azúcar, todavía hay muchas familias que siguen sin ser plenamente conscientes de la gran cantidad de azúcares que incluyen nuestras comidas.
Es bien sabido que comer azúcar no es beneficioso, es bien sabido, pero de lo que no somos conscientes es de la cantidad industrial de azúcares que contienen los productos que a diario compramos en el supermercado, hay tantos y tantos productos que lo contienen, que es muy difícil que nos demos cuenta, algunos por ejemplo son los cereales industriales, galletas o magdalenas del desayuno o el sándwich de pan de molde con zumo envasado que metemos en la mochila, que se suma a una lata de bebida carbonatada, batidos, algún bollo industrial para la merienda y en ocasiones pizza, salchichas, hamburguesas y sus salsas o conservas o cualquier otro producto procesado que nos permite solucionar rápido una cena.
Las prisas hacen que no nos fijemos en la cantidad de azúcar añadido que estamos sumando gratuitamente a la dieta de los más pequeños que y que pone en riesgo su salud. No se trata solo de caries y obesidad, sino de las enfermedades derivadas que van a provocar la primera generación de jóvenes con una esperanza de vida menor que sus padres por los malos hábitos alimentarios.
Hace poco la OMS recomendó no tomar más de 50 gramos de azúcar al día en el caso de los adultos, y en el caso de los niños no tomar más de 25 gramos diarios.
Es realmente importante que tomemos conciencia de la cantidad de azúcares que llevan los productos que añadimos en nuestro carro de la compra. Aunque inicialmente pueda resultarnos un poco pesado tener que revisar las etiquetas, finalmente nuestra selección será casi automática. Y aunque sea muy difícil eliminar completamente el azúcar, se puede bajar muchísimo su ingesta.
Comencemos eliminando los productos procesados , las galletas, la bollería, los zumos preparados y batidos, y elegir en su lugar por fruta, verdura, frutos secos,… Solo hace falta tomar conciencia e ir sustituyéndolos, por otros más naturales. Incorporar productos frescos y huir de la comida preparada, es un paso importantísimo para que la alimentación de nuestros niños sea mucho más saludable.
De nosotros depende que nuestros pequeños adquieran unos buenos hábitos alimenticios, por lo que tenemos que inculcar el amor por un estilo de vida saludable y consciente.
Puedes consultarme cualquier duda que tengas sobre nutrición en cada etapa del desarrollo infantil o en cualquier situación .
