Súperalimentos: LÚCUMA

Su sabor es una mezcla de caramelo y boniato, compartiendo algunos matices con el sirope de arce, por lo que es muy utilizada como endulzante de postres, helados y dulces en general.

Y aunque tenga este toque claramente dulce, posee un índice glucémico bajo que la hace apta para las personas diabéticas, por no provocar altibajos de glucosa, también favorece el bienestar digestivo y está llena de antioxidantes entre otros. 

Estamos ante una fruta rica en fibra, antioxidantes, vitaminas C y B3 (niacina), betacarotenos y trazas minerales como el zinc, el magnesio, el hierro, el potasio y el calcio. 

Los más relevantes: Los betacarotenos son unos potentes antioxidantes precursores de la vitamina A, necesaria para el crecimiento celular y la salud ocular y que contrarrestan el efecto de los radicales libres.

También la vitamina B3 o niacina, vitamina que abunda en la carne, por lo que si seguimos una dieta vegetal la lúcuma puede ser una gran fuente. La vitamina B3 es conocida por reducir el nivel de colesterol y triglicéridos en sangre. Además, se recomienda su consumo para asegurar un correcto funcionamiento neuronal, lo que favorece el mantenimiento de la memoria, la depresión y el cansancio crónico. Colabora muy eficazmente en el metabolismo de las proteínas y en el proceso de producción de la energía corporal, por lo que es ideal para deportistas. Su contenido en fibra contribuye a mejorar la movilidad intestinal.

 

Respecto a la vitamina C que contiene la lúcuma es mínima, pero no por ello es menos importante, ya que esta vitamina es un importante antioxidante que participa en la formación de colágeno, ayuda a regenerar las células y forma parte de las reacciones neurológicas y del sistema leucocitario, previniendo infecciones respiratorias.

En los lugares donde se cultiva la lúcuma se consume fresca. En ocasiones se cocina para obtener una textura más suave, similar a la de calabaza.

Al ser un fruto difícil de obtener fresco, se comercializa en seco, en formato de polvo liofilizado, se concentran todas sus propiedades, excepto la vitamina A en forma de betacaroteno, que solo está disponible en la fruta fresca. Así se puede agregar fácilmente a zumos, batidos, salsas y recetas de postres.

 

¿Habéis utilizado alguna vez la lúcuma en la cocina? ¡estaré encantada de leer vuestros comentarios!